jueves, 25 de diciembre de 2014

El Mito Trágico de <<El Ángelus>> de Millet

Un texto que nos permite adentrarnos al proceso de pensamiento de Dalí.
A partir del método paranóico crítico, el autor emprende un análisis profundo de El Ángelus, obra del pintor francés Jean-François Millet, donde con una serie de ensoñaciones y atavismos, como el mismo los define, desenmascara el  carácter subyacente de la obra y desenmascara a un Millet con fuertes cargas de erotismo.
El Mito Trágico de <<El Ángelus>> de Millet, es un gran ejemplo de ensayo crítico de arte plástico y, a la vez, constituye una ventana al pensamiento y proceso creativo de Salvador Dalí, en el que destaca la influencia que ejerce sobre él el psicoanálisis freudiano.
Este texto, extraviado en 1942, cuando Dalí debió escapar de la ocupación alemana de Arcachon y hallado de nuevo en 1963, es un texto básico para quienes estamos interesados no solo en el surrealismo, sino en general en el arte y la literatura.
Y es, a pesar de la complejidad del proceso de pensamiento plasmado sin cortes ni ediciones en el manuscrito, un texto de lectura ágil, que fácilmente puedes leer en una sola sesión. Ideal para leer en el aeropuerto o un viaje corto en carretera.

Título: EL MITO TRÁGICO DE <<EL ÁNGELUS>> DE MILLET
Autor: Salvador Dalí
Editorial: Tusquets Fábula
1° edición: 1978
Páginas: 178
Precio: 109 pesos

jueves, 9 de abril de 2009

Semana Santa 2009. Jueves: Santiago, N.L.

Es Semana Santa, como cada año, la comunidad católica prepara una serie de festividades para conmemorar la pasión y muerte de Jesucristo.A estas celebraciones religiosas se han unido a lo largo del tiempo eventos de corte cultural y recreativo.
Para este Jueves Santo, el municipio de Santiago ofrece, además de la representación del lavatorio de pies y la última cena, clases de baile, una callejoneada por el municipio, entre otros eventos.
"Para el día de hoy tendremos una clase de baile, posteriormente, a partir de las 7:00 de la noche será la misa, y a las 8:00 retomamos las actividades con una callejoneada por el municipio donde nos acompañarán los tmborileros de Allende, y teminamos a las 9:00 con un concierto de flauta", afirmó una de las varias guías de turistas autorizadas por el municipio, quien no quiso dar sus datos.
Así mismo comentó que respetarán los servicios religiosos, por lo que el viernes no habrá eventos culturales, "sin embargo, el sábado y el domingo retomamos (las actividades) con una callejoneada y algunos eventos infantiles y para toda la familia".
Durante las callejoneadas se ofrecerá a los asistentes una degustación de licor de manzana, producto tradicional de la región.

viernes, 2 de enero de 2009

Dos padres nuestros latinoamericanos


Canto nuestro que estás en tu tiempo,
no etiquetado sea tu nombre, venga tu intento,
hágase tu libertad en la prosa como en el verso,
danos hoy nuestro pan de cada día
y perdona nuestras blasfemias como también
nosotros perdonamos a los que no te entienden,
no nos dejes venderte al por mayor y libranos
del rap Amen.

Alejandro Filio

Padre Nuestro Latinoamericano

Padre nuestro que estás en los cielos,
con las golondrinas y con los misiles,
quiero que vuelvas antes de que olvides
cómo se llega al sur de Río Grande.

Padre nuestro que estás en el exilio,
casi nunca te acuerdas de los míos;
de todos modos, dondequiera que estés,
santificado sea tu nombre,
no quienes santifican en tu nombre
cerrando un ojo para no ver las uñas sucias de la miseria.

En junio de mil nueve setenta y cinco
ya no sirve pedirte "venga a nos el tu reino",
porque tu reino también está aquí abajo,
metido en los rencores y en el miedo,
en las vacilaciones y en la mugre,
en la desilusión y en la modorra,
en este ansia de verte pese a todo.
Cuando hablaste del rico, la aguja y el camello
y te votamos todos, por unanimidad, para la gloria,
también alzó la mano el indio silencioso
que te respetaba pero se resistía a pensar "hágase tu voluntad".

Sin embargo, una vez, cada tanto,
tu voluntad se mezcla con la mía;
la domina, la enciende, la duplica,
más arduo es conocer cuál es mi voluntad
cuando creo de veras lo que digo creer,
así en tu omnipresencia como en mi soledad,
así en la tierra como en el cielo,
siempre estaré más segura de la tierra que piso
que del cielo intratable que me ignora.

Pero, ¿quién sabe?, no voy a decidir
que tu poder se haga o se deshaga.
Tu voluntad igual se está haciendo en el viento,
en el Ande de nieve,
en el pájaro que fecunda a su pájara,
en los cancilleres que murmuran "Yes, sir",
en cada mano que se convierte en puño.
Claro, no estoy segura si me gusta el estilo
que tu voluntad elige para hacerse;
lo digo con irreverencia y gratitud,
dos emblemas que pronto serán la misma cosa.

Lo digo, sobre todo, pensando en el pan nuestro de cada día
y de cada pedacito de día.
Ayer nos lo quitaste, dánosle hoy.
O al menos el derecho de darnos nuestro pan,
no sólo el que era símbolo de algo,
sino el de miga y cáscara,
el pan nuestro.

Y ya que nos quedan pocas esperanzas y deudas
perdónanos, si puedes, nuestras deudas,
pero no nos perdones la esperanza;
no nos perdones nunca nuestros créditos.
A más tardar mañana saldremos a cobrar a los fallutos,
tangibles y sonrientes forajidos.
A los que tienen garras para el arpa.

Poco importa que nuestros acreedores perdonen
así como nosotros, una vez, por error,
perdonamos a nuestros deudores.
Todavía nos deben como un siglo de insomnios y garrote,
como tres mil kilómetros de injurias,
como veinte medallas a Somoza,
como una sola Guatemala muerta.

Y no nos dejes caer en la tentación
de olvidar o vender este pasado,
o arrendar una sola hectárea de su olvido,
ahora que es la hora de saber quiénes somos
y han de cruzar el río el dólar y su amor contra-reembolso
arráncanos del alma el último mendigo
y líbranos de todo mal de conciencia.

Amén.

Mario Benedetti


Fotografía: Cristóbal Martínez

martes, 30 de diciembre de 2008

Malditas guardias de vacaciones



Hay días que simplemente deberían de omitirse de la lista de cosas por vivir. Hoy es uno de esos, al menos hasta ahorita. La misma rutina de todos los días, estar encerrado en un sótano helado, aquí todo parece más lento, no hay absolutamente nada qué hacer.

Tengo pocas opciones de entretenimiento: el internet, un par de flashes de estudio (sin estudio ni modelos), dos cámaras, unos cuantos lentes y una tele que solo capta canales locales con programación idiota, pero nunca tanto como sus conductores.

Por eso se me va el día en ver fotos viejas, recordar momentos olvidados, sonrisas, ojos, guiños, labios, no puedo hilarlo todo y crear una persona, solo son fragmentos disperos incompatibles.

Afortunadamente todo terminará en unos cuantos días, esta sala de prensa se volverá a poblar de ruidos estridentes de puertas que abren y cierran sus hojas a perpetuidad, las teclas de las computadoras portátiles crujirán de nuevo bajo las garras de unos redactores obsesivos y los telefonos enlazarán a los lectores de noticias con sus reporteros y a estos con los equipos de grabación, y un halo de vida cubrirá de nuevo este cementerio de ideas no natas.

No queda más que escuchar una buena canción de Delgadillo:

De las tardes

Hace ya algunas semanas 
que me llevan las mañanas 
desifrarte en tu mirada y en tu voz 
que nunca eh sabido cuanto me has contado y cuanto no 
cuanto solamente lo imagino yo. 

Cuanto tien de ser sierto el paso a tus parques abiertos 
y a las frescas sombras de tu pabellon 
luego todo lo responderia esa tarde que me des 
aun que solamente sea por una vez. 

Entre amores y distancias 
de entro sueños sin sustancias 
y entre todo lo que no ah llegado a ser. 

Si me dieras una tarde para conversar mejor 
desdibujando la ropas con que vistes tu rumon 
podria mirarme en tus ojos si te asomas hasta a mi 
si te dieras una tarde, una tarde por aqui. 

Si te tubiera una tarde 
para avrevarme en la voz murmurante de tus fuentes 
una tarede para dos, una tarde para siempre 
por las tardes que no estas, por las tardes que no han sido 
y por las que ya no te vas. 

Una tarde solamente de tu vida 
tan solo un instante de tu juventud 
unas horas de tus horas y salidas 
al quisas de un mutuo encuentro 
que logremos ver adentro uno del otro 
un quisas que tu volvieras realidad. 

Una tarde que me dieras 
cualquier tarde de este mes 
para tardarme intentando 
llevarte una y otra vez 
aplocando con mis labios 
en tus labios de cancion 
la balada del encuentro 
del verano con la flor. 

Quien te tubiera una tarde 
para andarte, recorrer 
las veredas, los atajos 
en los campos de tu piel 
recorriendo amante, valles, lomas 
cauces de agua y flor 
conquistando tus llanuras 
toda una puesta de sol 

Solo dame algun tarde 
y yo me vuelvo una cancion en tus labios. 

Procurando y sorprendiendo 
por todo el atardeser 
tu sonrrisa mas bonita 
si te dejas conocer. 

miércoles, 12 de noviembre de 2008

La Luna


Con esta luna hasta parece que seguimos en octubre...


La Luna

La luna se puede tomar a cucharadas
o como una cápsula cada dos horas.
Es buena como hipnótico y sedante
y también alivia
a los que se han intoxicado de filosofía
Un pedazo de luna en el bolsillo
es el mejor amuleto que la pata de conejo:
sirve para encontrar a quien se ama,
y para alejar a los médicos y las clínicas.
Se puede dar de postre a los niños
cuando no se han dormido,
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
ayudan a bien morir.

Pon una hoja tierna de la luna
debajo de tu almohada
y mirarás lo que quieras ver.
Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
para cuando te ahogues,
y dale la llave de la luna
a los presos y a los desencantados.
Para los condenados a muerte
y para los condenados a vida
no hay mejor estimulante que la luna
en dosis precisas y controladas.

Texto: Jaime Sabines
Foto: Cristóbal Martínez

lunes, 1 de septiembre de 2008

Con dos camas vacías

Con Dos Camas Vacías

Ni tú bordas pañuelos, ni yo rompo contratos.
Ni yo mato por celos, ni tú mueres por mí.
Y antes de que me quieras como se quiere a un gato,
me largo con cualquiera que se parezca a ti.

De par en par te abro las puertas que me cierras.
Me cuentan que el olvido no te sienta tan mal.
La paz que has elegido es peor que mi guerra.
Lo que pudo haber sido... . lo que nunca será.

Que en cambio nunca supe ir a favor del viento,
que muerde las esquinas de esta ciudad impía.
Pobre aprendiz de brujo que escucha el firmamento,
desde un hotel de lujo, con dos camas vacías.


¿Quién hará mi trabajo debajo de tu falda?.
La boca que era mía ¿de qué boca será?
El roto de tu ombligo ya no me da la espalda,
cuando pierdo contigo las ganas de ganar.


Como pago al contado, nunca me falta un beso.
Siempre que me confieso, me doy la absolución.
Ya no cierro los bares, ni hago tantos excesos.
Cada vez son más tristes las canciones de amor.


Aunque nunca me cayo, guardo un par de secretos.
Lo digo de hombre a hombre, de mujer a mujer.
Ni me caso con nadie, ni me pongo amuletos.
Por no tener, no tengo ni edad de merecer.


Maldita sea la tinta que empapa mis papeles.
Maldita la tercera persona del plural.
Las uñas que se clavan, ahí, donde más duele,
si se te corre el rimel, cuando me haces llorar.



Texto: Joaquín Sabina

Foto: Henri Cartier-Bresson